Su sonrisa deja en evidencia que es un hombre sencillo, que intenta llevar una vida tranquila sin importar que sean días de corta en las fincas y sin dejar de atender la producción en Coopetrabasur.

Arcelio Lacayo tiene 56 años, es casado y sus raíces se dividen entre Guanacaste (Pacífico Norte de Costa Rica) y la Zona Sur. 

Su madre vivía en aquella provincia, mientras que su padre, originario de la comunidad de  Puerto Jiménez, era un hombre dedicado al cultivo de maíz, frijoles y otros productos; por eso no es de extrañar que él también dedicara su vida a la agricultura.

A los 15 años se inicio en el mundo laboral como empleado de Chiquita Brands, empresa para la cual cultivó banano, pero  al salir aquella empresa de la Zona Sur de Costa Rica, él se convirtió en uno de los socios fundadores de Coopetrabasur hace 28 años.

En la actualidad es Coordinador General de la cooperativa, encargado de la producción.  Considera que su principal aporte a Coopetrabasur lo dio años atrás cuando fue presidente del Consejo de Administración. 

Por aquellos años la cooperativa no tenía a quien ofrecerle el producto ya que rompió relación con Chiquita y otras organizaciones; fue ahí cuando surgió el vínculo con uno de los principales socios comerciales de Coopetrabasur hoy en día: AgroFair.

Gracias al vínculo con AgroFair, Arcelio señala que la cooperativa entró en contacto con el mundo del Comercio Justo; gracias a éste tienen seguridad comercial que trasladan a las familias, además el Comercio Justo los ayuda a mantener la cooperativa por lo que las comunidades aledañas a Coopetrabasur también se benefician.

A Coopetrabasur la ve como suya, ya que indica que es producto de su trabajo, da todo su esfuerzo por la organización y recuerda que desde un principio desarrolló un sentido de pertenencia que hoy en día mantiene.  Este sentimiento se refuerza al saber que Coopetrabasur es su fuente de ingreso por medio de la cual brinda seguridad a su familia.

Y es que los socios de la cooperativa reciben beneficios monetarios extra cuando se registran excedentes en los balances contables pero además gracias a los recursos generados por el Comercio Justo reciben servicio de consultorio medico, ambulancia, mejoras en infraestructura escolar, viviendas y servicios de sanidad para la comunidad.